martes, marzo 10, 2009

Presenting Arms

Estos son mis ojos, mi nariz, mi boca,
mis antojos por vestidos, abrigos y bufandas,
las ganas de ser madre (de hacerte padre).

Éste es mi cabello; caótico y feliz,
los recuerdos tristes de mis cumpleaños;
las madrugadas en Montevideo.

Estos son mis pies y en las noches tienen frío,
las lágrimas que lloré, hace un año, por mi abuelo,
la fiebre infantil; resultado de jugar todo el día bajo el sol.

Éste es mi ombligo; no le gusta ser tocado,
los besos que regalé y los que fueron robados,
las peleas con mis padres, los amigos perdidos.

Éste es mi cuello y su lunar coqueto,
el amor por las cerezas, las uvas, los mangos,
la felicidad acumulada por brincar en la cama.

Éste es mi abdomen, ésta mi espalda, los tobillos, las uñas,
la lluvia a los 21 años, el recuerdo de tu olor, mis orejas perforadas,
los días enferma, las mañanas con café, el miedo y los deseos.

Los entrego hoy, y para mañana todo será nuestro.
En una ceremonia no oficial, lo que soy (todo lo que soy) se rinde;
y comparto cada día del pasado, cada momento, cada significado.

(Presentando las armas para dejar de ser, oficialmente, sólo mía).

Detox

Por mi parte, será detox, vomitar primero tus brazos.   Los extrañaré, pero necesito que estén afuera.   Luego tus piernas, tu torso, tu bob...