Te voy a cuida mi Diente de León;
Dandelion que suena más coqueto.
De aquí para adelante,
ninguna ráfaga o estornudo te va a fragmentar.
No andarás con pedacitos mutilados,
tratando de caer en blando.
Vas a tener un hogar libre de sorpresas,
sin niñitas soñadoras tratando de pedir deseos.
Sin mujeres solitarias esforzándose por recuperar la infancia.
Tu futuro predecible: tu cuerpo derramado en el cielo,
tu falta de integridad. Ese puff mortal no será más.
Te prometo que hasta el último de tus días lo verás ileso.