Si vomitas un arco iris, algo debe andar bien.*
Si tus lágrimas saben a miel de Maple, la vida no debe ser tan mala.
Si tus piernas en vez de vellos crecen algodón de azúcar, sonríe.
Si encuentras zapatillas de caramelo, cómpralas sin pensarlo.
Si en tus pupilas habitan cachorros y conejito, tu alma tiene salvación.
*Línea no mía, sino de mi amigo Luis Mendoza