Tengo secretitos guardados en mi monedero,
y las monedas las mantengo en jarrones de vidrio;
separadas por: color, material y valor.
Tengo la foto que nunca tomé pegada en la frente;
pero por dentro de la cabeza,
así que sólo yo la puedo ver.
Tengo la respuesta perfecta para el momento perfecto
en el que por fin y oficialmente me pidas estar por siempre contigo...
(Si).
Tengo un muffin con miel, plain yogurt con fresas y
café con leche (no sugar) en el estómago;
estoy todo digiriendo.
Tengo un martes calladito, que sospechosamente parece lunes.
Tengo una agenda llena de proyectos necesitados de habilidad y gracia;
los dos elementos de los que rara vez soy dotada.
Tengo metros y metros de tela transparente para seducirte;
comúnmente se le dice andar desnuda
(o las tetas al aire).
Tengo muchas palabras, y poca estructura. Miedo y ganas de ser leída;
Amor por los trazos simuladores de conejos
y aversión a los armadillos citadinos.
Todo eso, y algunas cositas más;
pero las otras son secretas, van al monedero
(y no al blog).