Debo decir que el clima será hermoso,
que acurrucada en los brazos de varios amigos
seré de nuevo algo como normal.
Aunque mis días sin ti vendrán ausentes de besos,
tendrán muchas charlas, café y comida chatarra.
Tengo que aclarar que encontraré maneras de sonreír,
nuevas bromitas internas que me mantendrán positiva.
Lo hermoso de ser antigua en este mundo,
vilmente vieja y casi quedada,
es que ahora sé que la felicidad llega aun en los malos días.
Seré feliz aun con el corazón machucado.
Tu ausencia, mi lejanía,
serán inspiración para vivir todo lo que me falta.