Mil ganas de verte,
Escucharte hablar y hablar y hablar.
Ver la cara que haces cuando te cuento mis aventuras;
La sonrisa que dice: ¡Ahí viene el punch-line!
Tengo mil ganas de sentarme en un café contigo.
Que me rodeen las historias, las bromas;
Tus palabras seleccionadas.
Ver tus manos ilustrar, en el aire, todos tus enunciados.
Tengo mil ganas de salir de esta casa y encontrarte.
Tenerte de nuevo en mi vida.
Convertirnos en dos personas más
En uno de esos lugares hipsters de la Condesa.