jueves, agosto 28, 2025

Todo cool

I can come and I can go,
I can come and I can stay.
Or you can come,
while you look at my face.

Whatevs.
Todo cool.

martes, agosto 26, 2025

All in

All fuckin in.
Con todo,
por siempre
o hasta que ya no.

¿Quieres chatear?
Le damos.
¿Mandar videos?
Los veo.
¿Quieres fotos?
Las tomo.

All in.
Si nos vemos,
o si no.
Si solo es contarnos lo que pensamos,
te contaré cada idea.

Y si es desearnos,
te desearé
por siempre,
o hasta que ya no.

Esa noche

Con las palabras se teje.
Esa noche,
hicieron una colchita de fantasías. 
Con puntos muy abiertos 
por donde podía pasar el viento 
y se veían cachitos del cuerpo. 

El lago

No me da pena el lago profundo de sentimientos que he formado. 
Es una algo normal. Lo de sentir y amar. 
Si bien todas las truchas que cargué al lago han muerto. 
No me da pena. 
El agua sigue siendo mía. 

jueves, agosto 21, 2025

Solo es

El mar vale la pena porque es. 
Enorme, 
potente, 
azul perfecto. 

El mar vale la pena porque verlo me calma, 
me hace sonreír, 
me obliga a pensar.

No le pido al mar que me vea como yo a él, 
ni que me quiera,
ni que me desee.

El mar vale la pena porque es. 
Lejano
o envolviendo mi cuerpo
solo es. 

Enorme, 
potente, 
azul perfecto.

Aquí

Quédate hasta que el viernes se pinte de sábado, 
y la ciudad ande con sueño. 

miércoles, agosto 20, 2025

Hubo otros

El plan de aprender la receta de tu tatarabuelo.
El plan de ir a Mexicali a no dormir.
El plan de hacer kimchi.
El de aprender a tejer,
en clases,
rodeados de viejitas.

Y hubo otros:

El plan de ir todos los domingos a danza.
El de conocer todo sobre tés, sobre pastas.
El de ir a un rancho a buscar leche fresca
y preparar cafés con ella.

El de inscribirnos en speed dating
y fingir que nos enamoramos.

El de ir a Magic.
El de ir a Europa.
A Oaxaca.
A Veracruz.
A tu casa.
A mi depa.
A tu cama.

El de dejarte ver mi espalda.
El de los masajes.
El de recrear aquel día
(tú llevas la ropa,
yo las ganas).

El plan de ir por pho.
El de tomarnos fotos,
publicarlas,
y confundir a tus damas.

El plan de leernos poemas.
El de narrarnos películas.
El de nunca contar la historia real
de cómo nos conocimos.

Obvio lo noto:

me gustan los planes,
mini fantasías
(no siempre sexuales),
fantasías de tener alguien con quién hacer algo.

La fantasía de la compañía.

El plan secreto:
llenar el tiempo.

viernes, agosto 15, 2025

Free will

Recordé que tenía free will,
así que dibujé caritas felices en mis uñas.
Te sonreí, incluso cuando no me veías.
Y te amé,
aun cuando amarte no era del todo apropiado.

Te amé para mí,
para sentir adentro
el calor de todos esos soles viejos
despertando.

Recordé que era libre
de desearte todo lo que quisiera desearte,
y te deseé, todo lo que pude.
Solo para ver ese deseo adentro,
nadando en mi cuerpo,
pasando de mis labios a mis piernas,
rebotando entre pezones,
manteniendo mi mente caliente.

Y te quise también con ternura,
porque tenía ternura de sobra
y hacía tiempo quería usarla.
Y te admiré porque me gusta admirar,
y te viví:
cada segundo, cada ratito honesto.

Capturé en mi piel detallitos de tu cuerpo:
la fuerza, la presión,
la diminuta caricia de la primera cita;
porque fui libre de hacerlo.
Y los guardaré, aún.

Porque quiero.

Manos

El cuerpo pide manos.

Manos en el cuello, 
apretando ligero.
Lo suficiente. 
Lo necesario.

Unas en la espalda, 
acariciando y rascando;
con uñas cortas, con uñas largas,
dejando marcas:
caminitos rojos, 
calientes, 
elevados.

Los pies, manos que los estiren.
Los tobillos, manos que los atrapen.

Las piernas, unas que las recorran.
Unas que den masaje.

El cuerpo pide manos. 

Manos que pellizquen,
que aprieten,
que sostengan,
que jalen,
que acomoden.

Y labios.
También quiere labios.

Y algunos ojos.
Y voces.

Y cuerpos enteros,
con mentes,
con tiempo y calma, 
y sus propios deseos. 

miércoles, agosto 13, 2025

La playa

El sol que se acurruca en la piel
y la piel que lo reconoce.

Es el mismo sol,
de la infancia,
de la adolescencia,
de hace algunos días.

La arena se va adueñando de los pies,
y también ha logrado llegar al cabello.
El agua se evapora de mí,
dejando rulos desordenados.

El mar se niega a ser el mismo,
no quiere ser reconocido.
Cambia de color, de ritmo,
de fuerza.
Este mar es este mar,
no un mar atrapado en recuerdos.

Y yo, cubierta de sol y arena,
me mantengo aquí y en todos lados.
Me sorprendo con los pelícanos que he visto mil veces,
busco conchas que ya he recolectado,
y me río con las gaviotas
que de nuevo intentan robar mi comida.

Vivo entre lo que se repite
y lo que cambia,
como cualquier mortal.
En paz, con los labios salados,
frente a un mar que un día se habrá evaporado
y bajo un sol 
que un día explotará.

martes, agosto 12, 2025

Piernas

Ha estado soñando con piernas, desde hace años. 
Piernas como estas, me dice.
Las mías.
Grandes, añade.

Lo son. 

Aunque yo las llamo fuertes.

Se sienten fuertes. 
Caminan mucho. 
Saben nadar bien.
Se cansan cuando corro por la mañana 
y luego sostienen todo el día. 

Hermosas piernas grandes, balbucea,
mientras sus manos las acarician. 

Quisiera

Quisiera bailar increíble, pero increíble.
Para poder expresar mi frustración con danza
y que el resultado sea potente, profundo, dramático. 

No leve chistoso. 

lunes, agosto 11, 2025

Te recomiendo salir

Te recomiendo salir.
Meter tu corazón a la bolsa,
ponerte unos buenos tenis
y salir.

Conocer.
Hombres que amen y hagan música,
y la expliquen con calma;
que estén haciendo algo grande,
algo con coros y orquesta,
algo que te maraville.

Y busca hombres que sepan hacer pasta,
que tengan muchas recetas por compartir;
que aprecien el esfuerzo que te toma hacer galletitas,
y pregunten por los ingredientes de tu estofado.

Toma tu corazón y envuélvelo un poquito,
tal vez ponlo en una Ziploc
antes de meterlo a tu bolsa.
Que no vaya tan expuesto,
que no deje líneas de sangre por todos lados.
Pero llévalo.
No lo dejes en casa.

Sal y busca hombres amantes del café,
que tengan tardes complicadas, poco tiempo,
pero buena charla.
Y saxofonistas,
que te expliquen sobre dar clases
y se rían de tus bromas más bobas.

Un comediante.
Un hombre lleno de miedos.
Uno triste, uno confundido, un fetichista.
Hombres de ciudad y hombres que crecieron en la playa;
te recomiendo, sobre todo, a los que surfeaban.

Te recomiendo, si puedes,
encantar a un escalador,
solo por saber que puedes hacerlo.

Y hacer preguntas.
También contestarlas.

Reír a carcajadas
en medio de un bar, o en una barra.

Te recomiendo
recordar lo que eres
entre muchos desconocidos.
Meter tu corazón a tu bolsa,
elegir un buen vestido,
y salir.

martes, agosto 05, 2025

Y ya.

A veces, 
lo que una chica necesita 
es ser el fetiche de alguien.

Y ya.



(... aunque bueno, depende el fetiche). 

lunes, agosto 04, 2025

Cómo existir sin plan

Eres agua, y yo soy viento.
O algo así.
Yo, un montonal de palabras,
y tú, silencio.

Como si embonáramos. Perfecto...
pero igual no.

No escribas tantos enunciados de lo que no es.
No le cantes tanto a los que no están.

No te inspires en lo que no sobreviviría mucho tiempo
sin ese oxígeno directo que le debes dar.

No pienses tanto en ese hombre.
Deja de acariciar tu cuerpo.
Siéntate derecho.
Mira al frente.
Respira hondo,
y acepta tu soledad
”.

Consejos que nadie me ha dado,
últimamente.
Pero tal vez,
alguien me los debería dar.

No temas el silencio que dejan los hombres
cuando se van.
Ni a la mirada
de todas las otras mujeres
a las que sí han amado.

Deja de imaginar lo que se siente
una caricia sobre la piel que es deseada.
Deja que tu alma
se estire,
se olvide de los demás
”.

Consejos.

No te sonrojes por existir
en un mundo que no te tenía en el plan
”.

Eres agua, y yo viento.
O eres un alguien, y yo un otro.
Sin razón,
sin necesidad de ser amarrados con palabras,
sin una narrativa clara.

No cada conexión la debes explicar.
No la hace menos,
o más real
”.

El mar III

Esa agua,
que no refleja.

Se mueve tanto,
que es ruido, espuma,
y vida abajo.
Imposible tratar de ver, en ella,
reflejada mi mirada.

Esa agua en la que no me veo,
a veces más bien porque está
tranquila,
pura,
limpia.

Y me deja ver todo lo otro:
el mundo que en ella habita.

Y quisiera verme.
Me daría calma.
Saber que sigo,
saber que estoy.

Pero hay aguas
que no son para eso.

sábado, agosto 02, 2025

Soltería

Claro que me siento sola,
algunos días, algunas horas, algunas noches.
Y me pregunto: ¿qué tanta soledad habrá de aquí a mi muerte?

Y sube la fiebre, el terror, la piel caliente.
El aire se va.
Y debo recordar que estoy bien.
Usar las técnicas de terapia,
escuchar a las otras Amarantas.

Algunas veces solo quiero robarle a alguien su cerveza,
acurrucarme en unos brazos,
ver tele a su lado,
cantar en su carro.

Algunas veces quiero aprender a hacer otro tipo de pasta,
probar un restaurante,
intentar (poquito) aprender a bailar salsa.

Claro que es obvio, en muchos momentos,
que la vida de a dos es más sencilla.
Alguien con quien hablar de la película,
alguien que te mande música,
alguien que acaricie mi mejilla.

Claro que me siento sola,
algunos minutitos, algunos segundos, algunas semanas.
Algunas veces quiero que me toquen y me digan que me veo linda.
Quiero tocar a alguien,
y perderme en él un rato.

Es lo normal, lo esperado.
Pero no es todo.
El viento sigue, el sol es hermoso,
sonrío, y amo.
Tengo amigos, tiempo, letras…
y soltería, soledad. Tristeza.

Es un todo.
Soy un todo.
Y claro que quisiera, a veces, ser tan solo la mitad de un algo.

Pero. 
Por el momento. 
Esto es lo que tengo. 

Turismo sexual

Entras a mi vida.
Una noche. Otras noches, no estás.

Preguntas sobre lo que hago,
mis tradiciones, mis comidas.
Te interesa uno que otro ritual.

Frente a mí, pero lejano.
Pasaporte en mano…
para poder entrar, sí,
pero, en realidad, para no quedarte atrapado.

Lo disfrutas. Ríes. La pasas bien.
Te quedas un rato.

Me valoras porque no estoy en tu tiempo,
en tu espacio. Porque no pertenezco.
Exótica, yo. Desde mi realidad.
Un humano con sentimientos.
Completo.
Extraño.

Comes con hambre, después de nadar. Dormitas.
Tu piel tiene el color del verano,
y sonríes, satisfecho de estar,
y tranquilo porque no te quedarás.

viernes, agosto 01, 2025

Uno de esos días

Uno de esos días en donde, adentro, todo está callado.
Lo que es raro.

Porque, adentro, normalmente alguien siempre canta,
alguien cuenta los pasos,
y alguien más recuerda amigos.

Uno de esos días sin nombre:
no un martes, no un miércoles,
menos un jueves.

Afuera, el tiempo pasa en el cielo.
Los colores cambian.
Las aves salen a cazar,
y terminan la caza.
El mar entra,
y luego se va.

Pero adentro,
nada se mueve.
Como una foto calladita
del último momento
con sonido.

Nadie cambia de lugar.
Ningún amor crece.
Ningún dolor se olvida.
Adentro, nadie habla.

Nadie aparece.
No escucho consejos.
No tengo compañía.

La voz de mi abuela se pierde.
La sonrisa de Gerald se olvida.
Tu mirada, en esa mañana,
se escurre a la nada.