Nunca te dije, que las noches compartidas
En las que cenábamos coca-colas y cigarros,
me hicieron escribir lo que más amo.
Te debí haber llevado a la cama,
como diminuto agradecimiento;
pero no tuvimos tiempo para formalidades.
Dice que soy todo el ruido que quiere escuchar. Todo el silencio por el cual quiere ser devorado. Dice que soy un mar profundo, lleno de vid...