Y ni me salgas con la idea de que debería huir contigo;
Porque ni quieres que huya contigo, ni sabrías qué hacer conmigo…
Sólo quieres saber que una chica como yo, tomaría sus cosas y se iría contigo.
No me salgas con esa bromita, por favor.
Porque si, en efecto, en efecto, propuestas similares he aceptado,
Pero no te engañes; no fui tan inocente, no fui tan crédula...
Simplemente, eran tiempos llenos de ganas de huir.