Pero tengo ojos grandes que ya antes me han sacado de esto.
Tengo pies, talla 3 y medio, que saben cómo correr cuando es necesario;
Pueden brincar de piedra en piedra sin resbalar.
No te preocupes, tengo piernas fuertes; no lo pensarías, pero lo son.
Mis brazos, tal vez no lo mejor; pero están ahí, ambos, listos.
Y tengo palabras, muchas palabras; palabras que sé gritar y sé susurrar.
Saldré de esto.