Todos los momentos en los que no podré estar. Me disculpo desde hoy. Todos los días, las noches, los sueños que me perderé. Sin conocerlos, me harán falta.
En mi pasado violento quiero dormir hoy; porque no estoy lista para dejarlo escapar. La piel pálida, la sangre tibia, las lágrimas frescas; los sueños nunca fueron más hermosos.