lunes, diciembre 14, 2009

Quiero

Quiero no poder irme y tener que quedarme toda la vida aquí.
Que mañana amanezca la ciudad entera nevada y recomienden no salir de casa.
Que la pista sea imposible de limpiar, y los aviónes se queden dormidos.
Quiero estar atrapada en este hogar, sobreviviendo de galletas y leche con chocolate.
Que el frío nos haga dormir aun más juntos y se nos olvide todo esto de despedirnos.

martes, diciembre 08, 2009

Canicas y peces.

No sé qué hacer con los días que nos quedan.
Los veo en mis manos como canicas fragmentadas,
inservibles y punzantes.
No sé cómo unir todas las piezas y asegurar que se queden así.
No sé cómo amarte para que nunca me dejes de amar.
O cómo olvidarte y luego, en 10 años, volverte a encontrar.

Estos días que quedan, los veo como pescados,
en el piso, rogando con convulsiones por su vida.
Y yo inmóvil, rodeada de estos escurridizos moribundos,
en conmoción total; los voz inundada de lágrimas,
la mirada negociado un nuevo contrato,
y nada, y nada. Y muere uno; sus ojos cambian, y muere otro...

lunes, diciembre 07, 2009

La Muerte y el narrador.

La Muerte acaricia tu espalda, con uñitas delicadas, y te roba el aire.
Lo regresa; Lo roba, lo regresa, mientras sube y baja por tu espalda.
La Muerte lleva tiempo acostándose contigo. Despierta durante toda la noche, te acaricia.
Le gustan tus sábanas de franela. Son navideñas, pero es verano (curioso—piensa).
No le gusta mucho tu voz. En las noches, sin saberlo, le cuentas de tu pasado:
Mientras tú duermes, vas esbozando la historia de tu existencia, haciendo una larga novela
que pronto va a terminar: Hablas de tus padres, de tu esposa (ex esposa), de tu hijo... de todo lo demás.

Es una tradición para ella; por 10 noches, antes de morir, uno debe narrar su vida.
No todas las Muertes hacen lo mismo. No hay protocolo existente, no hay una sola manera de matar;
Algunas disfrutan de la sorpresa, otras prefieren el sufrimiento o se regocijan con la ironía.
Pero esta, la que te toca, se acurruca a tu lado y te escucha, es especial.
Le gusta saber el valor de las cosas. Le gusta entender.
Hay algo mágico en descomponer lo que ha tardado tanto tiempo en hacerse.
Como jalar un hijo de algún suéter pomposo. La enardece.

Es la séptima noche y le hablas sobre tu padre
Con pesadillas en tus sueños, sudando fuertemente y temblando (Sigue—te susurra);
Hablas sobre las noches que pasaste en vela junto a su cama. Sus últimas noches.
Ya no se podía mover, había dejado de hablar y no sabían sí los podía escuchar.
El hombre fuerte, el hombre guía, el hombre a seguir; reducido a eso. Una cápsula humana.
Pasaste más de una semana, sentado en el mismo sillón incómodo, esperando que se recuperara.

Pero no, no hubo mejora. Poco a poco lo obvio y predecible se dio como resultado: Su muerte.
La madrugada de un domingo, cuando el amanecer casi llegaba; perdiste a ese hombre molde.
Lloraste terriblemente, algo que no estabas acostumbrado a hacer.
Ella te recuerda, la Muerte. Recuerda las historias de tu padre (Llevaba 10 días acompañándolos en el ritual secreto de morir).
Se quedó contigo en el cuarto, hasta que tu hermana llegó: Pequeño confort.
Tu padre era un hombre interesante. Tal vez frío como padre y como esposo; pero trabajador y confiable.
Sus relatos estaban llenos de datos y estadísticas; tenía listas de cosas por hacer y cosas ya hechas.
Y aunque el listado de to-do no estaba terminado, se fue tranquilo. Feliz por lo que si logró completar.

Pero tú no hablas de eso, no mencionas los estudios que te pagó, los cuentos que te leía,
ni de esos regalos de cumpleaños que siempre estaban envueltos con papel dorado.
No hablas del viaje a España o del auto viejo que arregló una y otra vez.
Enfocas todas tus fuerzas en describirlo en esa cama. Inmóvil, patético, débil.
Hablas sobre tus miedos de terminar así, sin poder comunicarte, sin poder pedir lo que necesitas.
Sobre el odio de que te haya dejado así, sin decirte lo mucho que valías.
Hablas de su trabajo, como una enfermedad y te alegras de no haber seguido sus pasos.

Ahora es tu turno, tu cama, tu cuerpo y aunque tienes movimiento y voz;
No hay hijo que solloce a tu lado; porque hace tiempo te dejó de hablar.
No hay hija que llegue cuando mueras, porque nunca la tuviste.
No hay esposa, hay una mujer que se divorció de ti y se casó con un mejor hombre.
No hay nada. Sólo tú, 7 noches de historias tristes, sábanas anticuadas y una muerte segura.
Tus historias son terribles, aburridas y pretensiosas. Culpas a todos los demás por lo que no tienes.
Alteras los hechos, olvidas nombres y pronuncias mal algunos apellidos.

La Muerte ya no puede más.
Cada vez, te regresa menos aire.
Cada vez, te lo roba por más tiempo.
Terminemos ya con esto—Grita.
3 noches antes de lo planeado, mueres.

martes, diciembre 01, 2009

Sobre no estár allá y estar aquí.

Un cuervo gordo ha volado al árbol que está frente a mi ventana.
Mientras, en la computadora tus sentimientos se plasman en pequeñas letritas negras...
intentamos tener una conversación casual, como las de antes,
cuando me comprabas un café y yo te regalaba malos chistes.

Nuestras conversaciones casuales, nunca son en realidad casuales.
Son intensas o tristes; Conflictivas, caóticas, llenas de opiniones necias.
Siempre han sido así, y ahora, aun con el ruido de la tecnología,
no nos conformamos con una charla rutinaria.

Creo que los cuervos pelean con las ardillas. La ardilla del árbol suelta chillidos
(he descubierto que por cada árbol hay sólo una ardilla como habitante)
No pelean físicamente, eso sería asqueroso; pero discuten.
El cuervo, creo, come las mismas nueces que la ardilla y entonces, por naturaleza, se odian.

Mis letritas (en la computadora) son moradas, siempre he pensado que es un detalle cursi;
pero ayuda a no confundir nuestros argumentos.
En la vida real tu voz es muy distinta a la mía, supongo que tiene que ver con que tu seas hombre y yo no.
El caso es que en la cafetería siempre supimos quién había dicho qué.

El cuervo es grande ¡Pero en serio! Poe seguro tenía a estos cuervos como imagen mental;
viéndolo, entiendo por qué escribió lo que escribió.
También entiendo por qué escribes tú lo que escribes y por qué la ardilla protesta.
La ardilla y tú tienen miedo, el cuervo y yo estamos gordos (chiste malo ¡gratis!).

lunes, noviembre 30, 2009

Hombre en otoño.

Tal vez era el calor del verano el que me hacía poder recordar mi infancia,
tal vez en la ausencia del este me es imposible acceder a la información de mi pasado.
Como una palabra secreta para entrar, pero en vez, una temperatura.
La temperatura secreta que abre las puertas de los años muertos.

Entonces, en otoño (y más seguro en invierno) estoy destinado al presente.
A vivir como un personaje de ficción: Un humano adulto, sano,
Dotado de ideas y sueños, pero faltante de remembranzas.
Amputado de cualquier rastro de la alegría de la niñez.

Tal vez por la noche, deje que la calefacción tome control de mi apartamento.
Para poder, con suerte, soñar sobre helados, juegos y primeras navidades.
Recordar a la mascota que ahora no estoy seguro de haber tenido;
llamarla entre risas y correteos, sostenerla entre mis brazos, acariciarla
y acurrucarla hasta que el noviembre sin memoria, me haga despertar.

En la cocina.

En la cocina, la mantequilla se escurre entre las manos;
convirtiendo a los dedos en tentáculos resbaladizos.
La sal ahuyenta a los malos espíritus y a las papas insípidas.
Los animales son bienvenidos cuando llegan en trocitos o en rodajas;
sí están en forma de mascota, mejor que se vayan.

En la cocina, paso parte de mis días.
Catalogando proteínas, cuidando lácteos,
Transformando verduras irregulares en cubitos armónicos,
Convirtiendo la pasta en posibles recuerdos,
Sirviendo en platos blancos cartas de amor sazonadas con pimienta.

jueves, noviembre 19, 2009

Adolescencia

Quería ser una amante; para así acompañar mis madrugadas con cigarrillos y rimen obscuro.
Cubir mis piernas sólo con medias y mi cuerpo con encaje caro (del importado, del especial).
Quería ser la que nunca era olvidada.

Pubertad

Quería ser poeta; porque pensaba que era la mejor manera de asegurarme una vida de andar por ahí vagando, despeinada, abrigada con bufandas chillantes y abrigos enormes de lana.

Infancia

Quería ser espia.
Para saber muchas cosas y estar siempre en forma.
Para nunca confiar completamente y ser inteligente.
Pero no sabía, exactamente, en dónde estudia uno para esta carrera.

(y me rendí).

jueves, noviembre 12, 2009

No sé cómo explicarlo.

No sé cómo explicarlo, lo mucho que se me cansa el alma cuando te pierdo de vista.
Cómo los huesos pierden el calcio, no puedo caminar, no me puedo sostener.
Las lágrimas se me van a la sangre y todo el cuerpo se humecta de nostalgia.
Los ojos no quieren ver, aun cuando me esfuerzo, todo me parece borroso
y la piel se cansa de estar expuesta al mundo; a este nuevo mundo sin ti.

Mi cabello extraña estar entre tus dedos, deja de crecer.
Mi sonrisa se esconde junto a todos los recuerdos felices;
Cuando de pierdo de vista, pierdo los colores y al sol también.
Me doy cuenta que siendo mortal en cualquier momento podría morir.
Las pesadillas cubres mis pensamientos y me es imposible encontrar paz.

Las palabras se me esconden, el paladar se entume,
el abrumante silencio me habla con vulgaridad
(habla mal de mi cuerpo, de mi intelecto y del futuro en general)
No sé cómo explicarlo, pero en este escrito me esfuerzo;
para que lo entiendas y, si lo deseas, te apures en regresar.

miércoles, noviembre 11, 2009

Resultado

Un día, a los 27, a los 28, a los 29...
El adulto despierta humillado por el presente.
Con lágrimas confusas. Sin números que pueda seguir.
Despierta preguntándose cuándo fue que todo cambio.
Cuándo las navidades dejaron de ser divertidas.
Cuándo el miedo de la responsabilidad lo empezó a consumir.
Despierta aceptando que su apartamento es chico, y no mediano y menos grande.
Ya no sabe su lugar en la fila;
hace años que no compara su crecimiento con el de sus amigos.

Ya sabe contar su dinero, pero le sigue no alcanzando para todo lo que quiere.
Ya no tiene lonchera, pero la extraña.
Le hacen falta esas porciones de alimentos guardaditas en bolsitas y recipientes plásticos. Comparado con los combos baratos que cualquier idiota puede pedir sin salir del carro, el almuerzo que su madre preparaba sólo para él, era la gloria.

Su mente divaga a la infancia: al olor del primer día de kinder,
la textura del uniforme, las amplias ventanas con luz mágica,
el set de colores, el pegamento sobre los dedos, las pegatinas,
el recreo lleno de juegos y amigos.
Su mente recuerda, el olor de su madre, la seguridad que su padre aportaba,
la casa que nunca se sintió pequeña; el cielo azul, los árboles listos para ser trepados.
Las ganas de crecer, y ser más fuerte, de salir al mundo y ser un policía, un bombero,
un doctor o igual hasta un veterinario.
... y se preguntan ¿Qué pasó?,
¿Qué pasó con esa felicidad y, por qué no vuelve, por qué no la puede llamar?
Y sí esa felicidad no va a volver ¿Cuál es el punto de seguir?

Introducción

Empezó con una estrellita en la frente;
pero la estrellita no se entregaba sí el niño había sido descuidado
y se había salido de las líneas.
Empezó con la crayola circulando el dibujo de la pelota más chica;
había tres de donde elegir: una chica, una grande y una mediana.
Y la estrella se dio, se colocó en la frente.
Cada puntito tenía un número; se deben unir, en orden, del uno al diez.
La estrella era dorada o plateada y brillaba mucho.
El zapato izquierdo, iba pie izquierdo; el derecho al derecho.

Una filita del más chico al más grande (tomando en cuenta sólo la estatura).
Empezó con Para cuántos me alcanza y con Para cuatro;
Cuatro diminutos dulces fueron colocados en dos diminutas manos,
y tres monedas son sustraída.
Sí todo salió bien ese día, la estrella era portada con honor.
Los padres la apreciaron, el niño la cuidó.
Todo empezó con una lonchera relleda de un sandwich de jamón y queso;
pepinos cortaditos, acompañados de limón, una naranja o una manzana
y un juguito con popotito blanco.
Todo empezó con uniformes planchados,
Zapatos boleados, calcetines blancos y el nombre bordado en el suéter.
Sellito de abejita sobre las tareas terminada,
Una estrellita dorada en la frente.

Y la felicidad de transformó.
La felicidad se hizo una estrella de papel con adhesivo,
una mayor cantidad de dulces en las mismas manitas diminutas.
Más sellitos, menos líneas traspasadas, un mejor lugar en la fila
(nunca ser el primero, el primero es el más expuesto y el menos fuerte).

La vida cambió,
todo empezó por cositas tan pequeñas;
diseñadas para una personita pequeña por las personas que ya eran grandes y serias.
Todo empezó por salir de casa y ir a confrontar el mundo.
Un mundo que tiene muchas líneas (siempre las ha tenido, siempre las piensa tener).
y en el cual hay cada vez menos estrellas para repartir...

Conclusión

Y no lo sabe... no lo entiende.
Lo que extraña es lo que lo cambió.
Esos días de lápices #2 y borradores con olor a chicle
lo hicieron el adulto patético que ahora no puede dormir.
Fueron el uno, el dos y el tres, de la secuencia numerada que es su vida;
Esa constelación de puntos que lleva uniendo desde que nació.

No lo quiere saber, no quiero recordarlo así
Aun en su casa la estrellita dorada en su frente tenía poder,
la admiración de sus padres lo hicieron codicioso.
Ser casi el más alto de su grupo lo hizo vanidoso y superficial.

No quiere saber, que las cosas empezaron a fallar exactamente ahí.
Prefiere ver su vida, como elementos diseccionados;
una etapa aislada de las otras, y las otras disociadas entre ellas...

Prefiere dejar a la infancia intacta de culpa.
Admirarla desde lejos como si fuera una película,
una gran película, con excelente fotografía y el mejor guión;
los diálogos perfectos del pasado, que en nada lo afectaron.

lunes, noviembre 09, 2009

Suéñame.

Suéñame un poco más delgada.
Con vestidos largos que en la realidad no puedo pagar
que en este mundo no me quedarían,
la modista tendría que cortarles pulgadas de seda y encaje.
Pero en tu sueños son perfectos, y yo hermosa.

Suéñame oliendo a todas las flores que te recuerdan al verano,
corriendo entre pasillos dejando una estela irresistible.
Suéñame tierna como cuando nos conocimos,
tan virgen como entonces, tan curiosa como ahora.
Suéñame terriblemente excitada, pensando en el futuro.

Suéñame con una sonrisa difusa, las pupilas dilatadas,
el cabello salvaje cubriendo los hombros y el cuello.
Con pretextos para no volver a casa, con ganas de ver la noche pasar.
Suéñame a tu lado, minuto tras minuto, hasta que la madrugada te agote.
Y sí quieres, te prometo; hoy yo me esfuerzo, te sueño soñándome y me dejo tocar.

Fue un día perfecto;

en él las horas pasaron tranquilas
acompañadas de pan con mermelada y tazas con café.

Un día de aprender interesantes juegos,
más coquetos calificativos y el arte de nuevos besos.

Un día en el cual las películas viejas adquirieron tonalidades
nunca antes experimentadas.

Hacer la cena no fue molestia,
el proceso lento se convirtió en una caricia artesanal.

Yo tomé poquitas fotos, tú adelantaste poquito trabajo;
Y luego otra vez nos perdimos en el lujo de estar solos y despreocupados.

Ningún minuto se sintió desperdiciado.

miércoles, noviembre 04, 2009

Momentos reales (nunca dije relevantes)

Mi calcetín, el que es azul con rayitas blancas (o blanco con rayitas azules), el que traigo puesto. Mi calcetín se mojó, con uno de los charquitos residuales de la ducha que tomé.
(La cortina de la regadera falló).
Ahora mi calcetín está húmedo y triste, perfectamente consiente de que aunque sólo ha estado media hora en mi pie, pronto será removido. Tendrá que esperar en el cesto de ropa sucia a ser lavado, secado, emparejado y eventualmente (con suerte) de nuevo portado. La gloria de un calcetín es poder calentar un pie; no es estar en un cajón y mucho menos estar mojadito en el cesto de ropa.

Esto, lo del calcetín mojado, pasa muy seguido en mis días.
Mi casa esta casi en su totalidad alfombrada (mi apartamento). Esta alfombra, la que consume una alta cuota del piso, tiene el más estúpido color cremoso. Los tenis y los zapatos no pueden ser portados adentro o todo sería una orgía de manchas, imposible de soportar.

Así que camino con calcetines, algunos días (si ando atrevida) descalza.

Por el otro lado la cortina. La que falló. La debería cambiar; pero nada me asegura que la futura cortina tenga un mejor funcionamiento. Han habido otras, en el pasado, de distintos colores y texturas, con imanes al fina, sin imanes al final... y ninguna ha logrado evitar por completo el derrame de agua al piso de afuera...

Hay cosas en la vida, que simplemente son así.
Mi calcetín y yo, mis otros calcetines también, tendremos que lograr aceptarlo.

viernes, octubre 23, 2009

Lagartija

La lagartija se mimetiza y parece transparente,
y temo que cuando muera nadie la pueda encontrar.
¿O será, que cuando muera se hará del color de la muerte?
¿O será, que ya muerta no le importará que la vean
y por fin sabremos sobre su estructura real?

jueves, octubre 22, 2009

Amber

Neither the color nor the resin,
but the girl.

The girl with small legs that no longer run;
With arms that do not hug,
With a smile that does not come home,
eats soup and talks about her day.

The girl, that now emerges as other girls;
and she is, time and time again, taken.
Other legs, arms, smiles; gone.

And they all stay, cold, distant.
Forever trapped in a tarry reality;
Sharing the same sad name.

martes, octubre 20, 2009

Descuidada.

Perdí las palabras interesantes,
quizá las dejé en algún hotel
o se me cayeron de la bolsa mientras caminaba.
No tenían mi nombre, ni mi dirección;
sí alguien las encuentra no sabrá a quién entregarlas...
Tendré que aprender a vivir sin ellas;
y siempre caminar viendo al piso, por sí, tal vez, con suerte,
me encuentro las palabras de alguien más para poder usar.

¿Luego qué?

¿Sí un día me dejas y casi todo se va contigo?
Sí no tienes espacio en tu maleta para las bufandas tejidas
y las dejas porque en realidad han perdido el significado,
aparte de que no piensas tener frío sin mí.

¿Sí en vez de estambre enredas en tu cuello mujeres?
Mujeres más delgadas y flexibles que yo;
Mientras yo por acá nado, me hundo y duermo
entre telas, nudos y colores que antes eran tuyos;
Los que dejaste porque no cabían y porque no valían la pena llevar...
Huérfanos de tus afectos, como yo y todo lo mío.

¿Y sí por tanto calor, de portar otras mujeres,
te sale salpullido? Y no tienes calamina ni persona que te la unte;
Encendido por las ronchas pasas tus días,
frotándote contra cualquier cosa que se deje.
Yo abandonada no sé de tus pesares y no te puedo consolar.
¿Y sí me dejas y todo por siempre está mal?

¿Luego qué?

lunes, octubre 19, 2009

A moment.

I was frozen
an asexual statue becoming a woman.
I was lost;
and being found time and time again
by the same man... man... boy...
he was also a child.

In no need of that moment:
my arm being found,
my legs being found,
lips; found, neck; found,
back, front, inside and outside; found...

just a small piece, strayed forever.

Una visión.

En la mañana cuando los enormes chorros salen a regar el pasto,
el cementerio se llena de húmeda alegría
y un rechoncho arco iris se posa festivo sobre la tumba del abuelo.

jueves, octubre 08, 2009

Déjalo dormir.

El bebé que llevas atado al pecho,
el que succiona de tus tetas leche falsa y caduca,
Succiona, succiona, una y otra vez, sin parar, por siempre.
Nunca se llena, nunca está satisfecho.

El bebé que nunca crece y nunca deja de pesar.
Que huele a sangre y es frío como el acero.
El que no te deja aceptar abrazos
y menos hacer el amor con espontaneidad.

Este embarazo, parto y amamanto eterno.
Este bebé de brazos, de piernas, de espalda, de alma.
Déjalo, déjalo ir; perdónalo: Aliméntalo una vez más,
cántale su canción favorita, acuéstalo en la cuna,
tápalo con ternura y permítele dormir.

martes, septiembre 29, 2009

Un pedacito de algo.

¿Cómo es que haces que todo esto sea verdad?
Era un compleja pregunta y el árbol no tenía ganas de contestarla.
Rara vez alguien le hablaba; Pero eso no significaba que estuviera ferviente de hacer conversación con cualquiera (los árboles tienen diminutas necesidades sociales).

Dime, anda.
Seguía mudo.
Las ardillas, que apenas despertaban de sus siesta, la observan desde la tercera rama.

viernes, septiembre 25, 2009

Uno y Dos sobre aquí.

I.

Vivimos detrás del arco iris en donde los armadillos pululan libres
y las ranas imitan a los patos para arrullar a las nubes.

En donde las serpientes son libres de navegar el suelo sin ser perseguidas,
y en dónde todas las aves del plumas negras se juntan para volar.

Detrás del arco iris el viento ya no tiene que correr con locura
sino que duerme toda la mañana y camina tranquilo por las tardes.

Aquí, en donde está nuestro hogar, la lluvia es sentimental
Caen miles de gotitas con furia errática y luego ya no llueve más nada.

A la sombra de los colores las abejas engordan porque les sobran flores
y las lagartijas pueden crecer hasta ser completos caimanes.


II.
Donde habitamos, habitan muchos otros más; los cuales, como nosotros,
atravesaron el arco iris para poder llegar a un nuevo hogar

Dejando atrás el prisma deslumbrante todo florece, todo brota feliz del piso,
todo se magnifica y se reproduce; La visión hermosa del arco iris nos detenía.

Aquí en el reverso de lo que otros ven; entre los acorazados y los rechonchos,
con la lluvia que en minutos cae y se va, vivimos y somos felices.

A la espalda del arco iris cantamos canciones del pasado lejano
mientras nos damos besos y suscitamos un majo porvenir.

Así es como pasa.

Los niños tocan al mundo y el mundo reacciona a su toque
Los gatos se convierten en misteriosos artistas bohemios.
Los perros en caballos salvajes con crines dorados.
Las monedas en peces que guardan deseos secretos.

El mundo se eriza y llora lágrimas tibias;
Se rinde frente a las sillas dragones y los bosques de brócoli,
Sin saber cómo evitar que las pequeñas manitas lo cambien.
Todo lo que sea ha esforzado por ser, en unos segundos modificado.

Los hermanos; tigres hambrientos con los cuales no se puede dialogar.
El vapor de la ducha se torna gas tóxico y mortal.
El piso en lava, los sillones en islas
y las cajas de cartón en imponentes submarinos

El mundo los deja porque no sabe cómo detenerlos
y porque entiende que pase lo que pase en años todo será olvidado.
Toda la humillación vivida se convertirá en recuerdos vagos de adultos serios;
adultos que lo respetarán y cederán a sus normas y condiciones.

El mundo siempre gana y al final el agua es sólo agua,
el piso se queda como suave alfombra,
los gatos y los perros actúan como comunes mascotas
y los tigres nunca forman parte de la familia.

jueves, septiembre 24, 2009

Tic, tic, toc.

El clima cambio lento y constante,
y junto con él nuestra piel, nuestros planes y los sueños van cambiando.
El tiempo nos pasa mientras besas mi cuello
y con el tiempo también pasan los celos, los errores y los miedos.
Así poco a poco nuestras vida se sedimentan;
se acomodan juntitas en el sillón para ver películas.

Rico, rico nuevo clima
en este nuevo tiempo
junto a ti en el sillón.

miércoles, septiembre 23, 2009

El pez moneda

La monedita no llegó al fondo de la fuente,
sino que se quedó nadando.
Bailando en el agua con la gracia de un koi.
Buceando y pensando seriamente sobre cómo cumplir ese deseo;
Pero no había manera...
Hay muchas cosas que una moneda de 25 centavos no puede hacer.

lunes, septiembre 21, 2009

Oh Sweet Mary

Juguemos a ser moluscos Mary,
en el piso, con los vecinos.
Instead of sugar let's ask for sex, Mary.
It's new, it's hip and is swing.
Juguemos a que no hay reglas, ni amor, ni miedos;
va a ser genial, grandioso y coqueto;
Va a ser todo lo que quieres Mary,
todo lo que deseo...
Y todo el sudor, toda esta piel, Mary,
nos va a liberar.

viernes, septiembre 18, 2009

The rape.

Paint me red with your nails.
Turn me blue with your grip;
black and purple with your angry fist.
Make me yours here, now and forever.

jueves, septiembre 17, 2009

Perfecto.

Te quiero de manera enfermiza,
y aunque sé que es perturbante no me pienso detener.

Te quiero por hoy, mañana y cada minuto del futuro.
Te quiero aun en el pasado que no compartimos.
Encontraré manera de insertarme en tus recuerdos pubertos;
como un observador seductor pedófilo, un amante pervertido.

Voy a agitar tu pensamientos; como un shaker al Vermouth.
Te voy a poner drunk, and lusty y turbio como yo.
Porque cuando uno quiere así, no puede evitar contaminar la escena.
Convertirse en parte del estudio... y no me pienso detener.

Te quiero con miel de abeja en el ombligo, que pienso untar por tu abdomen.
yumm, yumm, yumm; piel bien disfrutada al lado de un té irlandés.
Si es domingo, y tengo tiempo, acompañarte con pan tostado, huevos revueltos y jamón;
Por toda la mañana engullirte, hasta qué esté por explotar.

Te quiero aquí y ahora, hablando de todo lo que yo no conozco del mundo.
Escucharte mientras que con una navajita voy cortando tu cabello,
hacerme bufandas con él, para mantener un misma temperatura por siempre;
chop, chop, chop... no me pienso detener.

Lo sé todo esto es más o menos enfermo;
pero así te quiero, y si tu me quieres, todo entonces es perfecto.

martes, septiembre 15, 2009

Infección

Enferma espera en casa, la fiebre sube poquito a poquito;
el cuerpo tiembla bajo escalofríos, los labios se secan,
y luego ella escribe cosas bobadas.

Los ojos arden, recuerda cuando era pequeña;
Su madre, como enfermera, le hacía gelatina
y caldo de pollo con chayote.

Duerme, despierta, duerme más y vuelve a despertar:
el horario lento de estar mal.
Sueños confusos, sudor, la piel desando el alivio.

Televisión, paseos diminutos por la casa,
comida deficiente, agua que sabe a la nada,
le parece imposible que la vida retorne a lo normal.

Los minutos se van arrastrando por la línea del tiempo;
como soldados malheridos, amputados, buscando trincheras.
Y ella espera que todo pase y termine, el triunfo contra la infección.

jueves, septiembre 10, 2009

Valoración.

He visto en tus ojos diminutos una soledad terrible
y no sé sí advertir a tu madre o culparla.
En tu tacto un pánico por el roce de otras pieles,
recelo portado como una bufanda que te sofoca.

Eres un animalito triste, un niño ausente de juego y amigos;
te he visto sufrir y no encuentro la causa.
Tu mirada se escapa como un bandada de gorriones;
Te escurres de lo físico sin una formal despedida.

Te veo sentado perfectamente, escuchando a la nada,
apretando en una mano la otra, ocultando tu colección de tics.
Pequeña criatura que con el tiempo se desmorona, lindo;
no sé qué puedo hacer para ayudar.

martes, septiembre 08, 2009

¿Qué tengo?

Tengo secretitos guardados en mi monedero,
y las monedas las mantengo en jarrones de vidrio;
separadas por: color, material y valor.

Tengo la foto que nunca tomé pegada en la frente;
pero por dentro de la cabeza,
así que sólo yo la puedo ver.

Tengo la respuesta perfecta para el momento perfecto
en el que por fin y oficialmente me pidas estar por siempre contigo...
(Si).

Tengo un muffin con miel, plain yogurt con fresas y
café con leche (no sugar) en el estómago;
estoy todo digiriendo.

Tengo un martes calladito, que sospechosamente parece lunes.
Tengo una agenda llena de proyectos necesitados de habilidad y gracia;
los dos elementos de los que rara vez soy dotada.

Tengo metros y metros de tela transparente para seducirte;
comúnmente se le dice andar desnuda
(o las tetas al aire).

Tengo muchas palabras, y poca estructura. Miedo y ganas de ser leída;
Amor por los trazos simuladores de conejos
y aversión a los armadillos citadinos.

Todo eso, y algunas cositas más;
pero las otras son secretas, van al monedero
(y no al blog).

The sell

Lovely face with eyes attached
Candy coated body.
Subtle sugar over skin.
Can bend, twist and flex!
A must have!
Priceless, precious, collectible.

miércoles, septiembre 02, 2009

Rarr!

El león duerme entre mis piernas
ignorando mis quejidos;
tranquilo descansa inmune al pánico,
a la adrenalina incrustada a mi piel.

No sé por qué eligió mi apartamento,
mi cama, mis sábanas de 200 hilos,
mis muslos; para dormir su siesta.
No sé por qué no lo sentí llegar.

Soñaba con guerras y serpientes,
lloraba por amigos ya muertos,
dolía por piquetes imaginarios de abejas mentales
y cuando mi recorrido termina, lo encuentro:
Un felino enorme en mi colchón queen;
usándome como almohada.

Terrible fiera. Reposa pacífico,
consume todo mi olor, exhala aliento cálido y salvaje.
Me da escalofríos su presencia
y no sé cuándo piensa despertar.

Espero no despierte gruñón,
espero no me pida avena y jugo;
se marche pronto, sin incomodar, sin lastimarme.
Este león, no lo conozco, no podría decir sí es de confiar.

Chao mojado.

La lluvia rápido se escurre por el viento,
con el plan deficiente de interceptar tu cabello;
Garras inútiles y débiles que te quieren detener.
Una caricia húmeda sin fuerza que no te inmoviliza.

lunes, agosto 31, 2009

Siesta y mejillas.

Un siesta bajo delicadas cobijitas de sol,
unos ojos verdes tapaditos;
dibujando sueñitos tiernos y espumosos.

Una siesta compartida en un día para dos;
Perfecto, perfecto. Tranquilo momento.
El viento arrullando a los árboles para que duerman contigo.

Una siesta calladita,
con excepción de la melodía de mi sangre;
corriendo de arriba a abajo, de abajo a las mejillas.

Hoy lunes

Si, ya sé... debo escribir.
Pero antes tengo que caminar unos 40 minutos,
esquivar cuatro víboras
y comprar huevos para la lasaña.
¡Regreso con más aventuras!

jueves, agosto 27, 2009

miércoles, agosto 26, 2009

Tejido

Este mismo corazón,
zurcido y remendado;
varios parches diminutos lo sostienen en forma.

Este mismo corazón,
desde hace 26, ya casi 27, años.
Ningún botón original le queda.

Almohadilla roja y vieja;
Rellena de recortes de revistas,
poliéster y algodón.

Mi nombre con apellidos, bordado,
en una diminuta etiqueta;
por si se llega a perder.

martes, agosto 25, 2009

Preparativos.

Dobla hojitas de su novela favorita,
origami, para armase un ramo.
Así personitas y palabritas aliadas
la acompañarán hacia lo desconocido.

Con un hilito casi transparente une flores a su vestido;
gardenias y orquídeas de tela blanca.
Inconsciente, agrega una por cada hombre olvidado.
Automático reflejo de las matemáticas del después.

Llevará zapatitos nuevos y azules, el miedo prestado.
Llevará todos los días que le quedan
comprimidos en dos lágrimas.
Llevara ojos marrones, herencia de su padre.

Así empieza y termina, continua.
Se regala completita; con tinta, con letras,
con flores, temor, calma y toques aguamarina.
Con todo lo que ama hace la caminata hacia todo lo que amará.

Ella, un armadillo y varios hombres.

El armadillo no entiende
y ella se siente segura.
El armadillo la observa,
es un animalito en verdad desagradable;
pero a ella no le molesta.
Se siente tranquila por su presencia,
por lo menos ya no está sola.

Teme a los hombres, no a la fauna salvaje.
Los hombres son la que la abandonan,
la que la cambian,
la que la olvidan.
La fauna sólo la escucha llorar,
a lo mucho la contemplan.

Y que te examinen,
y que te perciban,
y que te presten atención,
no es tan malo.

Que te digan: Mejor seamos amigos;
es siempre peor que garritas y un caparazón.

Te estimo, te quiero; pero no así.

miércoles, agosto 19, 2009

This is MY house.

They hide, but I know they are in here;
Dungy raccoons eating my Cheerios,
sleeping under my bed, trying on my shoes.

They run around (and probably dance happily)
when I take my shower;
Making a mess with my belongings.
Every day I have to pick up after them.

They sensually move their tails
while hidden in the shadows;
A shimmy, some salsa and a skip
(sick little animals love to mock me).

I store my favorite snacks on Ziplocs...
Pretty sure raccoons can't work resealable bags
(they have clumsy tiny hands and almost no brain).
Worthless raccoons. One day (one joyous day) I will hunt them.

martes, agosto 18, 2009

El demonio en la trenza.

El demonio vive en mi trenza izquierda,
que es la trenza más cercana al corazón.
Descansa acurrucado en el cabello seco y la liguita naranja.
Habla cuando duerme, y sus palabras tristes entran a mi mente;
Mis sueños se ven invadidos por muertes, carne cruda y epidemias
(ese demonio nunca trae buenas nuevas).

Desconozco, debo admitir, lo que hace por el día;
supongo que junto conmigo escucha canciones y ve la tele.
No le pregunto (No porque duerma a mi lado somos tan amigos).
Sin embargo cuando estoy enferma, se preocupa, eso es claro.
Sí la fiebre está encendida siento su cola, desde la nuca,
alargarse por toda la espina de mi espalda.
Es su manera de cuidarme, su versión de avena y jugo de manzana;
No sabe que su piel me quema, y yo por pena, no le digo.

Antes, por esos mismos rumbos, vivía una ardilla...
pero un día lavé mi cabello, lo enjuagué, lo tejí aun húmedo...
y la ardilla se fue, tal vez ya no cabía, o se sintió insultada, no querida.
Yo si la quería, la extraño; en las tardes lluviosas jugaba con mis orejas.

Los tiempos han cambiado, y ahora coexisto con un demonio entrelazado.
Meses pasan, y me pregunto si alguna vez va a marcharse;
Sí como a la mayoría de los hombres lo terminaré por aburrir.
Sería lindo, tal vez, vivir con la cabellera desalojada.

lunes, agosto 17, 2009

In memoriam.

Fuiste antes de ser nada;
un momento, una esquela.
Un secreto que mis amigas guardaron.
Una motivo (más) por el cuál se fue.

Eres la pena de no poder acurrucarte,
de aprender canciones que nunca te podré cantar.
Fuiste el momento no adecuado;
yo fui un tanto cobarde y mucho más valiente.

Serás nunca olvidado;
Una luz misteriosa en los ojos de mis hijos.
El olor dulce que cubre a todos los infantes.
Serás mi razón; así de simple, mi razón (lo prometo).

A man.

Long legs of milky white,
soft face asleep... waiting...
A puppy-like mind in a passion haze.
A muse-like body in need of a man.

Not a child in my arms,
never a child... I can see her:
A wicked woman with long golden hair.

No questions or passwords,
the doors to her existence are wide open.
Her love is the sweetest dew.
Her skin, a cozy blanket for tonight.

She corrupts my senses.
Mischievous female.
Filthy, immoral; in need of a man.

Late at night, she sings and dances; for me.
She wears light dresses; for me.
She plays, and smiles, and talks for me.
She longs for me, and cries for me.

Her legs of milky white weep rivers of red.
No questions or passwords.
Mischievous, filthy, immoral, in need of a man.

Binary.

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Binario
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viernes, agosto 14, 2009

Numeritos...

Nuevo contador !!
Después de unos 2179 días escribiendo he decidido saber cuántos visitantes tengo....
debo admitir que nunca quise poner uno de estos contadores, era demasiada presión...
pero supongo que lo tenía que agregar algún día... y ese día fue hoy.

Besos!

jueves, agosto 13, 2009

Notes.

Bunny Rabbits (#3, trial).

Do no seem eager to take desired form; they puff out in random shapes and colors.
Some eyes even take color of assigned blood.

When left by themselves the reproduce rapidly and generate even more undesired structures and shades
(must find lock for their genes).

Fear they might overpopulate.

Thinking of mixing traces of Rosemary (#2, final) or Sage, if finished, (#14, trial) into their flesh; so that tigers (#7, final), lions (#20, final) and other like predators might find them succulent.


Notas.

Conejos (# 3, ensayo).

No parecen ansiosos de retener forma deseada, brotan en formas y colores al azar.
Algunos ojos incluso adquieren el color de la sangre designada.

Cuando son dejados solos se reproducen rápidamente y generan aún más estructuras y matices no deseados.
(Debo encontrar un bloqueo para sus genes).

Temor de que puedan superpoblar.

Pensando en mezclar pizcas de Romero (#2, final) o Salvia, si es terminada, (#14, ensayo) en su carne; para que los tigres (#7, final), leones (#20, final) y otros predadores similares, los consideren suculentos.

martes, agosto 11, 2009

Autorretrato.

Orejeras sobre mis oídos conformadas por conejos esponjosos (amontonados unos sobre otros,
con corazoncillos palpitantes); orejeras que me hacen chorrear de sudor porque vivo en Florida
y me impiden escuchar que en verdad me amas.


Una frozen pop, frozen porque la prefiero congelada en inglés que en español,
y pop como Lichtenstein pero más dulce y de muchas más frambuesas.
Frozen pop para compensar las orejeras, porque soy libra y así vivo.

Ojos de mood ring por siempre atascados en Marrón Nervioso.
Un anillo en la mano derecha y espacio para un anillo en la mano izquierda (wink, wink).
Dos piernas, como la mayoría de las personas y la minoría de los perros.

Una pañoleta amarrada a la cowboy para que los vecinos me teman... mentira,
no traigo pañoleta; pero debería tener porque soy mala y lo debo advertir.
Cabello hasta los hombros, hombros hasta el cabello, pies hasta el piso.

Piel resistente al agua, resistente al jabón, resistente a tus besos;
pero no a las navajas... ni a las uñitas de los gatos.
9812 días vividos. 28 dientes más cuatro cicatrices hechas por tres dentistas.

Piernas no largas pero aun así coquetas, brazos con pretextos para envolverte.
Espalda faltante de alas enormes e imponentes,
no de ángel o de paloma, sino más bien como del pegaso/unicornio de She-Ra.

Poros abiertos, poros cerrados; la piel suspirando hormonas y sal.

Un útero, supuestamente fertil, lleno de nada.
Vulva, clítoris, vagina... el paquete básico femenino.

Copitos de recuerdos atrapados en las pestallas, hacen a los ojos llorar.

Esporas de lejanos amigos causando estornudos.
Confeti atrapado en el cabello, evidencia de festejo temprano de cumpleaños...

Total yo, toda yo, enmarcada en madera dorada; sin vidrio para poder respirar;
Vestida rojo, con collares de cuentitas y un poco labial.
Una sonrisa casual, iluminación natural, un retrato inmortal hecho con palabritas.

Vacaciones de ti.

Nadamos alegres en nuestra piscina de tirria,
libres, en un micro mar de defectos y recuerdos amargos.

Risas y carcajadas, el sol dorando nuestra piel.
Rebotamos una y otra vez en el trampolín,
empapados en evocaciones crueles de ti.

Nos turnamos para hacer clavados.
"Mírame" gritamos y corremos a toda velocidad
para lanzarnos felices a un ficticio vacío.
Sin miedo a la altura o a la gravedad;
Porque sabemos que nuestro odio,
tan fiel como los amigos que nunca pudimos ser,
estará ahí para recibir nuestro impacto.

Vacaciones de ti, en el agua clara del pasado.


Vacations from You

We swim delighted in our pool of aversion,
free, in a mini sea of flaws and bitter memories.

Laughs and guffaws, the sun tanning our skin,
We bounce time and time again in the springboard
drench in cruel allusions of you.

"Look at me" we yell as we run at full speed
to happily launch ourselves to a fictitious emptiness.
Without fear of height or gravity;
Because we know that our hate,
as loyal as the friends we could never be,
will be there to receive our impact.

Vacations from you, in the clear water of the past.

Munch.

Tendré que empezar a masticarte desde ahora,
si es que quiero, en algún punto de mi vida, lograr digerirte.

Poesía del ponche loco.

Me parece tan fácilmente consumible tu forma de hablar,
esas palabritas pronunciadas con acentos mezclados
(como un ponche loco* verbal; dulce y embriagante).



*Agua loca, para los que no son de Tijuana.

martes, agosto 04, 2009

Canción, lluvia y la falta de ti.

Escucho una canción que nunca antes había escuchado;
la cual posiblemente nunca vuelva a escuchar.
Es una canción triste, tierna y triste.

Las gotitas empiezan a golpear en mi ventana,
como un sosollo que no me he tomado el tiempo de sosollar;
Mojando poco a poco el vidrio, produciendo su propio ruido,
(una base de pequeñitas percusiones).

La voz en la canción se eleva (es una mujer lastimada);
y en mi propio mundo, los truenos empiezan un coro cruel;
Esos gemidos del cielo que, cuando uno está sólo, evidencían la soledad.

El piano lejano de ésta canción que no conozco
acompaña letras dulces y cariñosas.
El cielo llora lo que yo no quiero llorar.
Mis manos acarician las frígidas teclas de mi computadora;
mientras trato de captar, en un escrito:
El ruido, la música y cuánto te extraño.

lunes, agosto 03, 2009

Cabecita musical.

A veces, cuando te acaricio, me pierdo imaginando que eres un excéntrico instrumento musical.
Me pregunto qué clase de música generan mis dedos contra tu piel y tu cabello.
Cuáles notas se despiertan cuando mis uñas caminan por tu espalda.
Aquello que a veces confundes con arrullos (yo, ensayando a ser madre),
en verdad es mi voz tratando de seguirle el paso a la melodía de tu cuerpo.

Maquinita escritora.

Quiero una máquina de escribir
que haga mucho ruido cada que yo presione una tecla.
En la cual mi dedo meñique se atore por querer oprimir la i
(que mi tengo manos pequeñas
y no soy buena con la mecanografía)
Quiero el clanck clanck clanck;
imponente, irresistible y terminal,
de la tinta estampada sobre el blanco papel.
El clink alegre que indica el final del espacio libre.
Quiero que una mini-sinfonía acompañe a cada uno de mis borradores.

sábado, agosto 01, 2009

Aftermath

Después de la guerra
el humo denso y aterciopelado
cubre los cuerpos;
Como una sábana obscura mandada por Dios.

Después de la guerra,
los pactos firmados;
Los soldados son cosas,
occisos que deben ser enterrados.
Las esposas son viudas,
y las madres duelen del útero mutilado.

Después de la guerra,
el silencio sin explosiones
hace que los ojos liberen lágrimas.
El viento sin pólvora juega con el cabello de los hijos abandonados.

Después de la guerra,
el fríos es más frío; pero el calor no empeora.
Los amantes son ajenos,
las sonrisas cortas.

Después de la guerra se cincelan las lápidas,
ser renuevan las clases,
se cuentan historias, se editan,
y poco a poco todo se olvida.

Fotografía

En algún punto, mis ojos entienden, que la cámara no está ahí para cuestionarlos;
sino más bien, para tratar de explicarlos al mundo.

Y se relajan, adquieren un color tenue, se dilatan, empiezan a charlar...

Mis ojos cuentan de haber sido lastimada por hombres,
de ahora vivir tranquila, del terror de extraviarme en el presente,
de momentos llenos con ternura.

Hablan sobre todas esas noches con lágrimas que ahora parecen lejanas;
Pero que igual en momentitos duelen de nuevo.

Hablan sobre las sombras de imperfecciones que me siguen a todos lados.
Sobre entender que nunca seré talla cero, ni uno, ni dos...

Cuentan sobre esos días entregados al agua;
en albercas o bajo la lluvia (emancipada por el líquido).

Mis ojos relatan cuentos sucios de sexo y del amor hecho,
de noches tiernas encerradas en las sábanas; gemidos y palabras.
Hablan claro y fuerte de vida, de muerte, de abuelos y compañeros perdidos,
de futuros posibles hijos.

Mis ojos marrones, a veces claros por la luz, a veces obscuros y serios;
se exhiben al mundo, temerosos de ser juzgados
y al mismo tiempo, alegres de poder conversar.

Fotografías, una tras otra los atrapan;
Como burbujas que no se revientan.
Burbujas de miel que se han llenado en mis días de vida
y que ahora, por fin, pueden empezar a narrar.

Liberarlo todo, foto tras foto. Sacarlo;
volver a sufrirlo, volver a disfrutarlo, poder explicar.
Mis ojos hablan, tanto como hablo yo cuando me siento enamorada.
Y sin muchas dudas, una vez entendidas las reglas, se entregan.

Cuando andábamos

Mientas andábamos pensé que ambos mirábamos el cielo, buscando arcoíris, viendo las nubes con forma de cachorros.   Pero tú observabas mis p...