El silencio después de decir
Te quiero
me traga por completo
y me escupe
en toda clase de futuros.
Te quiero
me traga por completo
y me escupe
en toda clase de futuros.
Te quiero.
Y nadie sabe
que estamos aquí;
enredados en esta cama,
tranquilos, sonrientes,
sin conocernos lo suficiente.
Te quiero.
Y aguanto la respiración.
No vaya a ser
que el movimiento de mi pecho
afecte el sonido,
el aire entre nosotros,
y lo que será
nuestro destino.